La tendencia es inevitable. A veces pienso que tardó más de lo previsto en llegar, pero ya es irreversible y todo el que quiera tener grandes números en su concentración deberá empezar a pensar que no es una reunión de motos con algún concierto entre sus actividades, al contrario, debe ser un concierto de música con motos de reclamo.

Los más puristas se tirarán de los pelos, pero no tiene vuelta atrás. Cualquier concentración motociclista multitudinaria esta destinada a convertirse en un concierto de música, donde las motos serán, el pretexto y en el peor de los casos solamente los adornos.

Hace ya como veinte años le comenté a mi buen amigo Mariano Parellada, entonces aún sólido presidente de Turismoto, organizadores de Pingüinos, una concentración ya entonces multitudinaria y que seguía creciendo; le dije: “Esta concentración o se convierten una feria o se acababa”. Mariano, un purista acérrimo, al que no le gusta ni la palabra motero y prefiere la de “motard”, como se llamaban  los aficionados practicantes de las motos y los viajes en Francia,  me miró con extrañeza y me dijo, “No eso no. Pingüinos es una concentración de motos ante todo y así seguirá”.

Yo me equivocaba. No es una feria en la que se convertirían las concentraciones motociclistas destinadas a crecer y hacerse populares, no era una feria no, era un concierto musical.

Hasta entonces los organizadores de concentraciones llamaban a sus amigos músicos para que tocaran en la reunión. Las más consolidadas y multitudinarios hasta ofrecían como un privilegio el tocar a una banda en su reunión y entre ellas se disputaban el honor por hacerlo. Eran otros tiempos. Poco a poco se fue evolucionando para que las reuniones de motos fueran menos de motos y más de guitarras eléctricas. ¿Cómo?. Si así fué, y creo que uno de los primeros escalones lo puso Faro con su concentración internacional veraniega, que si mal no tengo los datos ya es la mas multitudinaria de Europa. Acuden miles de motos sí, pero sobre todo decenas de miles de personas a escuchar y disfrutar de los conciertos a los que las motos le dan igual y solo son un adorno en torno al escenario y sus músicos, que son lo que les importa.

¿Eres tan tradicional que no me crees? Sigamos con mas ejemplos. Pingüinos. Tras el desastre de su cambio de directiva con la expulsión de todos los socios y cuando los políticos metieron mano a saco en una reunión que no podían perder por los recursos que aportaba incluso inventando todo tipo de falsedades, vieron un filón, un evento donde la gracia eran las motos. El dinero no estaba en ellas, si no en lo que se podía hacer con ese pretexto. Los políticos de todas las clases que por lo general son «aves oportunistas» capaces aprovechar cualquier resquicio en beneficio propio, aunque digan que es para el pueblo que representan, vieron que seguir apostando únicamente por las motos no tenía margen de crecimiento y que los números no darían para más. Seguramente que asesorados por todos esos cargos puestos a dedo que tendrían sus estudios, mas o menos tendenciosos, lo normal es que bajaran las cifras y con ello la entrada de recursos. Los normalmente menguados bolsillos de los motards no podían mantener “el chiringuito” a los niveles que su arrogancia les empujaba. Dirigieron descaradamente a la nueva junta directiva, por cierto, que ha sido hasta ahora la única organización que me denunció y además penalmente ante un juzgado. El motivo un articulo publicado en mi propia web y que hoy sé bien, agitado por el entonces alcalde, un político hoy ministro de no muy buen reconocimiento publico. Se empeñaron en humillarme y acabar con mi prestigio. Curioso cuando ellos mismos en la anterior edición me habían otorgado el Pingüino de honor. Les salió mal, muy mal, perdieron el juicio y los tres recursos posteriores. Toda la historia completa en https://www.gustavocuervo.es/sentencias-articulo-traidor-miserable

Resumiendo: solo un párrafo de la sentencia. …la libre comunicación de información como la libertad de expresión ocupan una especial posición en nuestro ordenamiento en razón de su doble carácter de libertad individual y de garantía de la posibilidad de existencia de opinión pública.

 

Siguiendo con la historia de la concentración de Valladolid y con una organización títere, fue muy fácil ir girando la reunión motociclista a un concierto con motos. Inmediatamente se empezaron a multiplicar los inscritos pasando de apenas un par de decenas de miles de motoristas a mas de 40.000 ¿inscritos?. Bueno, si cuentas las entradas a los conciertos como inscritos, sin duda que si. El número de participantes aumenta aun más rápidamente de lo que disminuye en esta concentración el número de motoristas que acuden a la misma.

Estos dos casos no son los únicos. Al comienzo del otoño se celebrará en Peñíscola la concentración de marca BMW Motorrad Days. Sus organizadores no disimulan que lo mas importante serán los conciertos. Grupos prestigiosos atraerán a una importante numero de personas cuyo único objetivo es escuchar música en un recital en directo y para los que las motos solo les han servido de pretexto para organizar esta cita. Así se manifiesta en la publicidad que transmiten por medios y redes. Cuando escuchas que el objetivo de este año es multiplicar al menos por dos el numero de participantes de años anteriores y se ha cambiado tanto el lugar de reunión, como la agencia organizadora, que ya acumulaba mas de un decenio de experiencia, es fácil deducir que no se quiere seguir haciendo solo una buena concentración de motos con unos conciertos, si no mas, bien al contrario.

Por supuesto que no estoy en contra de esta tendencia, si eso es bueno para los organizadores, las marcas y los recursos de la zona donde se celebran pues bienvenidos sean los cambios, resultaría absurdo negarse a la evolución. Lo que no me gusta es la manipulación en los datos cuando dicen que son por ejemplo mas de 50.000 las motos que asistieron a una reunión. Las cifras de asistentes motociclistas no serán ya ciertos, ni en esta ultima, ni como lo son desde hace años en las de Faro ni la de Valladolid.  En ninguna, pues salvo el GP de Jerez, que por diversos motivos es el único evento capaz de reunir tantas motos, el resto es falso. No hay capacidad en España y Portugal para convocar en una reunión motociclista tan elevado numero de motoristas.  Contar a los asistentes a un concierto que acuden cuatro o cinco personas en un coche o en transporte publico como participantes de una concentración de motos es una manipulación.

Me equivoque en la forma pero no en el fondo. Las concentraciones de motos en España no evolucionaron a ferias, mas bien a conciertos.  Sigo pensando que el siguiente paso será la feria, donde además de conciertos habrá otras muchas mas actividades. Y ¿por qué lo pienso? pues simple, observo el mundo de la moto en su conjunto, mucho mas allá de la reunión de pueblo o de capital de provincias. Miro a USA donde hace ya muchos años los conciertos y las ferias con las motos como protagonistas de reclamo son la manera de reunir a centenares de miles de participantes.

Gustavo Cuervo