De curvas por Castilla con la Triumph Tiger Explorer.

mapa-España--Gustavo-Cuervo

Hacía mucho tiempo, quizá un par de años, que no hacia un largo viaje por España en moto. África, Asia y América me habían llenado los últimos años con espectaculares viajes en moto on y off road. Tenía ganas de volver a rodar largo y tendido por España y con unos amigos argentinos tuve la ocasión de rodar sin prisa por nuestra piel de toro, pero claro no solo por España, ya puestos, ¿por qué no añadir también Portugal, Francia y Andorra?.

El plan de viaje era largo y muy ameno incluyendo muchos de los más interesantes lugares de Madrid, Castilla León, Portugal, Galicia, Asturias, Cantabria, Euskadi, Aragón, sur de Francia y Cataluña. Para realizar este viaje conté con la nueva Triumph Tiger Explorer, una gran moto con un bonito nombre.

La primera de sus palabras, triumph, que da nombre a la marca ( triunfo ) es suficientemente evocativa. Para los que ya llevamos unos decenios en esto de las dos ruedas con motor, es una marca mítica, legendaria, no en vano nació en 1902. Aún recuerdo a alguno de mis amigos poniendo en marcha a fuerza de pedal de arranque, aquellas Triumph Bonneville bicilindricas, puramente inglesas, vibrantes y la mayoría de las veces sudadas de aceite. Personalmente no tuve ninguna Triumph, como tampoco tuve ninguna Norton, que junto con Royal Enfield y BSA componían el grupo de poder de la industria anglosajona en el mundo de la moto.

La-Alberca--Triumph-Tiger-ELa segunda palabra Tiger ( tigre ) da nombre a toda una serie de motocicletas de la marca y la tercera explorer ( explorador ) es sin duda la más atractiva. Menos mal que aquella época en la que las motos solo se denominaban exclusivamente con siglas y números ya paso para casi todas las marcas. No es lo mismo subirse en una adventure que en una XJ-950 RRX-3. En la primera ya tienes una cierta predisposición, en la que solo tiene números y letras no sabes si serás un espía o un te dispones a utilizar un programa de ordenador. La cuestión es que la palabra explorer incita a explorar, que como dice la Real academia de la lengua en su primera acepción es «Reconocer, registrar, inquirir o averiguar con diligencia una cosa o un lugar».

Eso es lo que nos gusta hacer a los viajeros en moto. Explorar aunque sea por lugares y territorios conocidos, seguro que averiguaras más y más cosas cada vez que vayas de viaje en moto.

La Explorer es una moto que te seduce nada más ponerla en marcha. Su motor es la más destacada de sus virtudes. El tricilindrico suena bien, no vibra, y resulta una elección muy adecuada como concepción para moto. Claro que los dos cilindros tienen más personalidad motera, de hecho tres de las más reputadas marcas de motos basan sus ventas en los bicilindricos BMW, Harley Davidson y Ducati, así que, aunque tendrá que pelear mucho Triumph quiere convertir su tricilindirco en la alternativa. Tres cilindros tienen ventajas de diseño y funcionamiento claros respecto de los dos y casi igualan en suavidad de funcionamiento a los cuatro. Es solo ligeramente más ancho que un bi, ( aunque claro depende de cómo los coloques ) y casi siempre más estrecho que un cuatro. Sus prestaciones son más fáciles de conseguir para menor vibración y requieren menos «manos» para llevarlo bien sin ser un experto.

Triumph Explorer frontal

La Explorer es una moto grande. ¡Como han crecido las motos en los últimos 30 años!. Hace poco tuve la ocasión de tener juntas y probar la primera BMW R-80-GS y la ultima R-1200 GS. Al poner una al lado de la otra, la primera parece una moto de iniciación por su tamaño, y en los años 80 era una moto muy grande. Lo mismo sucedería si pusiéramos juntas una Triumph Trident tricilíndrica de 1968 y la Explorer actual. Al subir en ella notas que es una moto «baja». Su chasis multi-tubular, estrecho en la entrepierna, y el diseño de su asiento bien achaflanado a los bordes permite llegar al suelo con facilidad aun para pilotos no muy altos. A los lados de tus manos, sobre el manillar y al frente en el cuadro de relojes un completo equipamiento se traduce en numerosos botoncitos de control. Como no soy partidario de empezar a toquetear todo antes de montar prefiero mantener la configuración estándar por ejemplo de control de tracción ( tres posiciones ) subir la pantalla a su máxima altura para carretera y por ahora nada mas, ya habrá tiempo de jugar con todas las opciones cuando tenga la moto un poco por la mano. Así que vayamos por partes y por tanto de viaje.

El-Escorial Triumph ExplorerSalimos de Madrid por la ruta clásica; El Escorial, Puerto de Navacerrada Segovia. Clásica por qué es «la lógica» para los extranjeros que parten de Madrid hacia el norte. La visita al menos desde el exterior del Monasterio de El Escorial y las curvas de Navacerrada antes de alcanzar la ciudad patrimonio de la Humanidad que es Segovia. Para mí Los Molinos y Navacerrada son mi particular «pista de pruebas» ya que vivo aquí y lo conozco, digamos bien. La Explorer empieza a seducirme con su fácil movimiento entre curvas. Una moto tan pesada (260 kg) y además cargada con maletas y bolsa de depósito no deja notar sus kilos. Empujan 137 caballos y un par motor de 121 Nm.

Segovia-Triumph-ExplorerSegovia, Ávila por la histórica N-110… Siempre que hago cualquier tramo de esta carretera pienso que si la tuvieran los norteamericanos, o simplemente los franceses seria una ruta conocida internacionalmente por sus cualidades turísticas, pero ya se sabe, en España no sabemos «vendernos». Una ruta que desde Soria hasta Plasencia corta Castilla al medio enlazando tantos lugares de referencia fundamentales que necesitaría para sí sola la clasificación de Patrimonio de la Humanidad, pero esa es otra historia. El caso es que no tuvimos demasiada suerte con el clima. Saliendo de Segovia, lástima que al estar en obras no pudiéramos estacionar las motos en el jardín del Alcázar, y tras «apretarse» alguno de los compañeros el correspondiente cochinillo, llovía. Con agua intermitente y algo de frio la siguiente parada fue el mirador de los Cuatro Postes, la mejor vista de la ciudad amurallada de Ávila ( otra que es Patrimonio de la Humanidad ). No teníamos en esta ocasión demasiado tiempo para la visita pues nos esperaba uno de los mejores tramos para moto de carretera de la península ibérica. Entre Bejar y La Alberca hay varias maneras de ir. El primer tramo es común para todas y ya anticipa lo que te encuentras rodando por la zona de la Peña de Francia. Curvas enlazadas de todo tipo, incluso alguna bastante traicionera, en subida y bajada muy escaso tráfico. Uno de los paraísos para todo el que guste de las curvas. La primavera en esta región es algo espectacular. Los bosques de una variedad arbórea impresionante, muestran sus mejores galas. A tu nariz se cuelan los olores de las retamas, la genista explota de amarillo, las hayas, robles, pinos, y sobre todo los castaños, llenan el cielo con sus diferentes tonos verdosos. A su abrigo, la carretera serpentea de forma magistral. Empiezo a descubrir que para estos tramos no es necesario utilizar el cambio de la Explorer siempre que no quieras «ir con el cuchillo en la boca». En tercera marcha puedes hacer cualquier tramo de curvas gracias a un motor elástico pero que se estira mucho y siempre progresivamente sin exabruptos. Dulce enérgico y plano a cualquier régimen desde 2000 hasta 9000 rpm. manteniendo la moto en esta marcha se puede rodar bastante ligero y cómodo. Si lo deseas y si lo tuyo es montar siempre «alto de vueltas», con lo que consigues mayor retención antes de abordar las curvas 2ª y 3ª son tus marchas con esta moto en estos tramos. Trabajaras mucho más y ganaras pocos segundos, eso sí.

Triumph España y Portugal  (4)De frenos anda bien la Explorer y de suspensiones también. Lo que notas claramente si comparas su clásica horquilla con sistemas de suspensión alternativos utilizados en motos de gran peso que evitan el hundimiento de la moto en su parte frontal al frenar, es que tendrás la sensación de que frena poco. No es cierto, aunque lo parece, y el hundimiento de la horquilla puestos a mencionar sus ventajas también hay que decir que al acortarse la distancia entre ejes frenando hace a la moto más rápida para girar. Y otra, facilita las maniobras en parado al poder aprovechar el rebote para ir marcha atrás. Aún con todo para mi gusto, un poco mas de mordiente a los frenos delanteros no le vendrían mal. El ABS es como tiene que ser, poco intrusivo, vamos que para saber que realmente estaba ahí y funcionaba tuve que esperar a una pequeña recta, chequear los testigos de que todo estaba ok, y tirar de la palanca a fondo en plan frenada de pánico. Funciono bien y con alta frecuencia. Muy bien, me gusto.

La Trimuph a pesar de las maletas cargadas y la bolsa sobre deposito que lleve durante todo el viaje, y de las que hablare en otro capítulo, se mueve con agilidad. A su favor la relativa estrechez de los neumáticos. En una loca carrera por poner mas y mas goma en las ruedas se ha perdido agilidad y con un 150 en llanta 17 detrás y un 110 en llanta 19 delante la verdad es que es más que suficiente. Resulta curioso que una moto alta, no de asiento, si no de estructura, especialmente por la joroba de su depósito de combustible, cambie tan ágilmente de dirección. Tiene sus trucos eso sí. Es una moto que se mueve bien con las rodillas y la cintura, también cargando pesos sobre los reposapiés, y no también solo con el manillar.

La-Alberca-(32)La Alberca como decía era nuestro destino del día y es sin duda una excelente base de operaciones para conocer una comarca que puede atraparte durante varios días. Buenas o muy buenas carreteras secundarias y terciarias de buen asfalto y muy escaso tráfico, plagadas de curvas. Da igual por donde llegues a esta bella población de piedra y madera. Piérdete por sus sinuosas rutas y disfrutaras como un enano. Nosotros lo hicimos. Continuará.

CAPITULO II Extremadura y Portugal.