Las excelencias del paisaje las numerosas carreteras que atraviesan puertos de montaña espectaculares, los recoletos pueblos y aldeas cargados de singulares tradiciones y una gastronomía deliciosa son los argumentos más destacados de una región que reclama varios días para conocerla. En Cantabria solo hacen falta unas decenas de kilómetros para pasar de los puertos de montaña a los marinos, de las pistas de piedra  colgadas de los 1.500 m a las playas de fina arena.

 PUERTO DE SAN GLORIO   

Todos los puertos que alcanzan Cantabria desde el centro peninsular deben estar incluidos entre los mejores tramos de moto de España. San Glorio es sin duda uno de los más memorables.

 Rútómetro: Riaño-Portilla de la Reina-Llánaves- Puerto San Glorio-Potes.: 55 Km

Hay algo muy característico de todos los puertos de montaña que buscan la Cornisa Cantábrica desde el centro peninsular. Nada tiene que ver el hacerlos en uno u otro sentido. Si bien la mayoría de los pasos de montaña tienen acusadas subidas y bajadas por ambas vertientes en los que atraviesan la cordillera Cantabria esto no sucede, debido a que por el interior parten desde la elevada meseta castellana y no necesitan de muchas pendientes para alcanzar los pasos. Justo al revés de lo que sucede en sentido inverso, pues partiendo desde prácticamente el nivel del mar deben alcanzar cotas en torno a los 160 metros lo que provoca trazados empinados y muy sinuosos. Así por tanto todos los puertos pero especialmente este de San Glorio es recomendable hacerlos dos veces una en cada sentido para apreciar verdaderamente sus virtudes.

Nosotros partimos desde Riaño, una moderna población leonesa situada en el litoral del embalse que anego el valle donde se encontraba el antiguo pueblo y que hoy ofrece un paisaje casi alpino con un gran lago rodeado de agujas montañosas. Solo llegar a Riaño ya es toda una buena  experiencia para los moteros. Tanto si vienes desde Palencia y Guardo por la LE-241 y el Alto de las Portillas como si lo haces desde Cistierna o Boñar por la N-621 podrás disfrutar de unos trazados muy de moto.

El tramo recomendado comienza en Riaño y resulta muy suave hasta Portilla de la Reina. Paisaje de montaña y curvas pero no muchas ni excesivamente cerradas ya que la ruta sigue el curso del recién nacido rio Yuso, por un paraje de praderas atrapadas en entre altas montañas. El rio se estrecha y la carretera también para buscar un corto pero magnifico desfiladero a su paso por Llánaves. Atención a primeras y últimas horas del día pues es paso obligado del ganado que utiliza en algunos tramos la carreta como único camino entre los pastizales y los corrales. Al abrirse el desfiladero y unas pocas curvas más arriba sin mucha pendiente se alcanza el paso, el puerto de San Glorio. De la misma cima parte una pista forestal que lleva hasta el mirador del Oso. En la zona del monumento se tiene una de las mejores vistas de los Picos de Europa por lo que siempre es un desvío recomendable. El descenso es vertiginoso, precioso y  variado. Aunque la tónica son tramos de curvas enlazadas que acaban en paellas  que marcan cambio de rumbo para volver a repetirse, también hay otras zonas que no siguen la norma y sorprenden con su trazado inesperado. El paisaje cambia radicalmente según se desciende pasando de los pastos y ralos paisajes de alta montaña a los densos bosques atlánticos que ofrecen en otoño sus mejores colores. El mirador de la Corza ofrece la mejor vista sobre la cabecera del valle y la aldea de Entrerrias marca el fin del descenso de gran pendiente. Solo queda un tramo de carretera más sencillo entre la Vega y Potes, son diez kilómetros de carretera de valle típico de Cantabria. La variedad del paisaje la diferencia de trazados y pendientes hacen que al llegar a Potes y si no te dejas atapar por sus múltiples encantos, des la vuelta y realices otra vez al  puerto en sentido contrario sin duda una experiencia completamente diferente. Son en total 28 kilómetros de subida o bajada, con notable desnivel dentro de Cantabria y otros 27 de paisaje de altura por los páramos y praderías de León que brindan una variedad de paisajes y trazados difíciles de encontrar en tan corto espacio en otras regiones peninsulares.

 Y ADEMAS

Potes. La más bella y turística de las poblaciones de montaña cántabras. En todas las épocas del año podrás encontrar magnifico ambiente especialmente los fines de semana. Artesanía, gastronomía, arquitectura, paisaje, actividades en la naturaleza… de todo y para todos los gustos. Potes es referencia fundamental para los que presuman de conocer la montaña cántabra.

Lo mejor: Ambiente turístico en cualquier época.

Monasterio de Santo  Toribio de Liébana  Enclavado en pleno valle de la Liébana este cenobio tiene junto a Jerusalén, Roma, Santiago de Compostela y Caravaca de la Cruz el privilegio de celebrar el Año Santo, otorgado por medio de una bula del Papa Julio II, en 1512. Aquí se venera el «Lignum Crucis», el mayor trozo conocido de la cruz donde murió Cristo.

Mirador del Cable.  El funicular más espectacular de España remonta el precipicio de los Picos de Europa para dejar a los excursionistas en la cima de este lugar prodigioso, ideal para comenzar las excursiones de alta montaña. Muchos excursionistas toman el teleférico hasta el Mirador y descienden caminando hasta Espinama por una pista sencilla que permite de una manera sencilla disfrutar de lo mejor es los altos valles de los Picos de Europa.

El tesoro del Cantábrico

En Cantabria solo hacen falta unas decenas de kilómetros para pasar de los puertos de montaña a los marinos, de las pistas de piedra colgadas de los 1.500 m a las playas de fina y dorada arena.

Había salido muy temprano. No era mucho pero al menos tenía tres dias para disfrutar, perdido del mundo, a solas con su moto. La elección del viaje no le había resultado complicada. Le habían hablado tanto de Cantabria. Que si el mar, que si la montaña, que si los Picos de Europa. Demasiadas cosas para hacer caso a la imaginación desbordada de alguno de sus amigos montañeros, de algunos de sus clientes tan aficionados a la buena mesa y de unos cuantos colegas enamorados de las curvas.

El calor axfisiaba toda España. Castilla, Andalucía y Extremadura se abrasaban bajo un sol de justicia. El hombre del tiempo aseguraba, con el satélite Meteosat brindanado sus imágenes para confirmarlo, que salvo en el Cantábrico donde, llovió, llovía y lloverá, el resto de España sería seco y caluroso. Ideal para asegurarse una exitosa excursión por cualquier parte de la Península Ibérica. No importaba el tenía que viajar al norte, por mucho que la silueta de España vista desde el espacio exterior se dibujara perfectamente en su totalidad, salvo el tramo de la cornisa cantábrica.

Madrid, Somosierra, Aranda de Duero, calor, mucho calor, había que vigilar la temperatura del aceite al alto ritmo de la autovía. Burgos un par de semáforos, sigue el calor, Puerto del Páramo de Masa y el siempre entretenido y bello tramo entre Tubilla del Agua y la Escalada. Las nubes cubrían ya todo el frente, mientras por atrás el sol seguía apretando. Empezaba a hacer fresco. Cilleruelo de Bezana desvío de la N-623 por la C-6318 parada a ponerse la chaqueta. Aquello no era fresco era verdadero frío. Carretera en mal estado, comienza a llover y al tomar en Espinosa de los Monteros la carretera hacia el puerto de Estacas de Trueba empezaron los bancos de niebla. Puerto de las Estacas de Trueba, hacia demasiado frío, pero no podía dejar de perpetuar su entrada en Cantabria. Con cuidado extrajo la cámara fotográfica de su bolsa, la encaró y escuchó un pitido de alarma. La máquina estaba sufriendo un brusco cambio de temperatura y no respondía a ninguno de sus mandos electrónicos. Hasta el enfoque estaba desconcertado. La solución sacar la veterana cámara mecánica y esperar a que la moderna tecnología se acostumbrara al clima. No podía ver nada mas allá de la gris masa húmeda que le envolvía mientras comenzaba el descenso hacia Vega de Pas. Sabía según el mapa, que hacia levante otros dos puertos, La Braguía y El Portillo de la Sía, estarían en iguales o peores condiciones, les suponía a todos increíbles entradas a Cantabria. Es sin duda el Puerto del Escudo el paso mas conocido entre la meseta y el interior. El Portillo de la Sía tiene en su continuación el puerto de Asón un verdadero espectáculo natural con el nacimiento en grandiosa cascada del río homónimo. El Portillo de Lunada , el mas alto de los orientales (1350 m) comparte con Estacas de Trueba la belleza de los altos prados desnudos de otra vegetación. Asperos y adustos los valles se abren lentamente en su descenso en busca de las abrigadas vegas donde se aglutinan pueblos que conservan un aspecto completamente tradicional. A occidente del Escudo en el camino de Reinosa ( N-611 ) el puerto del Pozazal apenas puede ser considerado como tal comparado con sus vecinos, eso si, el descenso por el desfiladero del río Besaya hacia Torrelavega compensa su falta de paisajes de alta montaña.

Playas y monumentos

La capital cántabra enclavada casi en la mitad geográfica de la Comunidad Autónoma, divide en dos los recorridos por la costa. Hacia Poniente una serie de pequeñas playas Somo, Loredo, Langre, Ajo y Ris se suceden por la accidentada costa hasta alcanzar Santoña y Laredo donde las mas afamadas y grandes playas de San Martín y Salve sirven de escala para continuar hacia Castro Urdiales. Son una buena elección para pasar unos dias de asueto en contacto con el mar, pero el que busque además los atractivos de los pueblos monumentales y el incomparable paisaje de a alta montaña debe salir de Santander hacia poniente.

Su elección estaba clara, le habían hablado tanto de los Picos de Europa que no iba a dejar escapar la oportunidad de conocerlos. Toda la noche lloviendo y una mañana con cielo completamente encapotado no presagiaban un agradable viaje. Tambien le habían dicho que eso no era de fiar en verano pues el día mas gris y triste se trasforma por obra y gracia de los vientos cantábricos en un día radiante en pocos minutos. Llegando a Santillana del Mar empezó a darle la razón a su informador. Las nubes desaparecían dando paso a un cielo intensamente azul que contrastaba con el verde brillante de los prados todavía empapados. Aparcó su moto en el parking habilitado a la entrada del pueblo. Matriculas alemanas, francesas y especialmente inglesas hablaban por si solas de la fama internacional de esta villa. Paseando por las calles empedradas descubrió el encanto de esta joya del urbanismo cántabro. Palacios, iglesias, pero especialmente casonas de piedra y madera. Comillas, la Playa de Oyambre ( Reserva Natural) y San Vicente de la Barquera tambien ofrecen muchos alicientes para el turista, pero para el se hacia un poco tarde. El día estaba casi completamente despejado y no debía perder aquella oportunidad. Debería atacar cuanto antes las altas cimas de los Picos de Europa. Siguiendo la N-621 se alcanza el limite territorial de Cantabria y se entra en el Principado de Asturias. Panes es la primera referencia. La ruta por asfalto hacia Potes continua por la misma carretera para regresar a Cantabria siguiendo el valle del río Deva y su profundo desfiladero, pero el tenía otros planes. Siguiendo la no menos interesante carretera AS-114 se remonta el valle del río Cares hasta Arenas de Cabrales. Allí un desvío hacia el interior y en continua ascensión hacia Camarmeña, ( comienzo de la ruta pedestres por la llamada Garganta Divina del Cares ) Tielve y Sotres. La ruta mostraba ya todas las características propias de una carretera de alta montaña. Aprovechando los valles la carretera gana altura hasta alcanzar una fuerte rampa final donde se encuentra Sotres. Allí necesitaba información muy puntual así que entro en un bar y antes de preguntar nada no pudo evitar pedir una tapa del aquel queso cuyo olor impregnaba el ambiente. Claro que después de degustar tan exquisito y fuerte condumio sintió la irresistible necesidad de pedir un queso completo, eso si bien envuelto, para llevarse a casa los aromas de la alta montaña. Le informaron del comienzo de la pista y tambien de que se podía atravesar el Parque Natural aunque sin salirse nunca de la pista (año 1998 ) . Apenas unos cientos de metros antes de la aldea la pista se encontraba muy bien marcada. Por la derecha el camino en zig-zag remontaba la ladera en busca de la base del Naranjo de Bulnes, o Pico Urriello como le denominan los astures, de frente el paso hacia los puertos de Áliva y Fuente Dé. Sencilla al principio se va complicando el camino progresivamente con la aparición de piedra suelta. Efectivamente nada mas pasar Vegas del Toro una rampa de piedra suelta complica las cosas.

Solo necesitaba decisión, pero en buenas dosis. Primera, gas suave pero continuo y aguantar los rebotes tipo cabra montesa. Mucha ropa, la bolsa de cámaras en bandolera y un exceso de kilos para estos menesteres de la GS-1100 le hicieron sudar la «gota gorda». Todo fue relativamente bien hasta que un fuerte rebote le descolocó completamente, agarró el embrague y se quedó totalmente clavado. Tomó aliento, e intento continuar. Los neumáticos que tan buen comportamiento le daban en la carretera de montaña aquí se volvían en su contra. El aplomo de dirección, y la potencia que le habían traído disfrutando hasta este recóndito paraje eran ahora verdaderos enemigos. Hacían falta tacos, un buen mordiente para salvar el problema. Los caballos sobraban y prácticamente todos se desperdiciaban calentando las piedras grandes, disparando las mas pequeñas y ahondando un agujero. Había que estudiar la situación con calma, recobrar verdaderamente el aliento y concluir con el tramo de un solo tirón. Vamos, vamos, remando un poco aquí y allá, la rueda trasera salido del surco que ella misma iba creando y remonto sobre las piedras. Sin perder la inercia, agarrando fuerte el manillar concluyó el tramo y con el final de la fuerte pendiente disminuyeron tambien las piedras. En lo alto del amplio collado llegó el momento para el merecido descanso y nada mejor que aquel lugar para pasmarse integrado en un panorama que embriagaba todos sus sentidos.

El Parque Nacional de los Picos de Europa, el mas antiguo de España, no puede ser recorrido mas que por vehiculos autorizados o bicicletas por las pistas que unen Sotres con Espinama y las variantes hacia el Chalet Real, La ermita de la Santuca y El mirador del Cable, fin del teleférico de Fuente Dé. Un lugar tan prodigioso donde te regalás los pulmones con el purisimo aire. Potes. los pueblos del valle del Deva y el puerto de San Glorio, serían las siguientes escalas. Un pequeño territorio tan saturado de lugares interesantes que requieren su tiempo, sus dias para gozarlos en su totalidad.

En el Mirador del Oso cerca del Puerto de San Glorio, no encontraba el momento para alejarse de aquellas montañas. Permaneció hechizado con el embrujo del la puesta del sol sobre los Picos. El sol se ocultaba lentamente tras las recortadas siluetas de piedra y le atrapaba con su invisible pero implacable red. El subscosciente le jugó entonces una mala pasada. Levanto el brazo izquierdo y remangandose echo un vistazo al reloj, mas de un modo automático que consciente. Sin fijarse siquiera, bajo el brazo y siguió contemplando el paisaje. Las nubes se empeñaban ahora en dibujar fantásticas formas sobre los picos.¡¿Que hora?! Un relámpago de cruda realidad le recorrió la espina dorsal y la brutal vuelta a su rutina puso su mente a trabajar como un autómata. «Mañana reunió con Pérez a las 9,00 después, repasar las cuentas de FISA y después y después y después….Un moribundo rayo de sol le intento sumergir de nuevo en el paraíso. Fue suficiente para hacerle tomar la decisión, fijar una hora limite y mentalizarse de que aquella noche le iba a robar unas cuantas horas al sueño. Total 380 km hasta casa no eran tanto como para abandonar tan pronto el tesoro del Cantábrico.

Gastronomía cántabra. Cocido montañés

En este recorrido por los bellísimos parajes orientales de la comunidad autónoma de Cantabria, habrá quien prefiera las excelencias de los mariscos y pescados costeños a la mas recia cocina montañesa. En cualquier caso nadie sale defraudado sea cual fuere la elección. Junto al litoral se pueden degustar excelentes sardinas y anchoas que además de asadas se preparan en empanada en cazuela o con salsa amarilla. La ventrecha de bonito, los calamares ( rabas ), cabracho en salsa verde los maganos encebollados, almejas a la marinera y el sorropotón un excepcional marmitako tipico de San vicente de la Barquera. Dentro de la cocina del interior cántabro, destaca el cocido montañés, una especie de fabada con judías, berza y cerdo que acude a las mesas de lujosos y humildes restaurantes como el mejor representante de los fogones montañeses. También es tierra de excelente carne de ternera. Buenos quesos. Postres arroz con leche, quesadas, sobaos.

Para llevar a casa: Postres: Las Corbatas de Unquera y los sobaos pasiegos son los mejores dulces para transportar. Magníficos quesos: Picón, Trevisco, ahumado de Aliva. Reigadas C/ Tetuan 35, Santander. Vinos:Comarca de Liebana, orujo de Potes.

Santander. Capital de Cantabria, disputa la cabeza entre las ciudades mas bellas del norte hispano. Jardines de la Magdalena, Playa del Sardinero, Museo marítimo del Cantábrico. Catedral Basílica, Puerto deportivo. Casino.

Torrelavega. Nudo de comunicaciones desde el medievo.Ciudad industrial. Renombradas ferias todos los miércoles. Casas montañesas blasonadas

Comillas.  Llamada la Villa de los Arzobispos. Lujosas residencias y Palacios. Universidad Pontíficia estilo neogótico. Palacio del Marques de Comillas, Palacete de Gaudí. Bonitas playas.

Santillana del Mar.  Villa crecida en torno a los restos de Santa Juliana que se guardan en la Colegiata. Antigua capital de las Asturias Orientales. Conjunto arquitectónico de máxima importancia siglos XV a XVIII, catalogado como Monumento Nacional. Mansiones señoriales Palacio de Perredo-Barreda, Casa de los Villa, Casa de los Estrada, Casa de los Abades, Casa de los Barreda Bracho. Calles empedradas de tipismo inigualable. Proximidades: 1 km cueva de Altamira pinturas prehistóricas.

San Vicente de la Barquera. Bella población marinera. La parte vieja monumental ocupa la cima de la isla anclada en la bocana de la ría. Magnificas playas. La panorámica mas completa del conjunto urbano se tiene desde la carretera hacia Oviedo pasada la gasolinera. Puente de 28 ojos. Fiesta de la Foliá segundo o tercer domingo de Pascua, declarada Interés turístico.

Desfiladero de la Hermida.  Uno de los desfiladeros mas impresionantes de Cantabria. Tomar en Unquera junto al limite provincial con Asturias la N-621 hacia Potes.El tramo mas angosta se encuentra entre Panes y el monasterio de Lebeña. El valle del río Deva es el paso asfaltado oriental que rodea los Picos de Europa.Buena zona de pesca.Aguas termales.

Potes. Capital de la Liebana. Centro turístico. Alojamientos rurales ecoturismo. Arquitectura tradicional montañesa, calles porticadas. Torre del Infantado o de los Orejones Siglo XV. A 3 km monasterio de Santo Toribio de Liébana.

Fuente Dé Cabecera del valle del Deva, antiguo circo glaciar. Punto de partida para incursiones en el corazón de los Picos de Europa. Teleférico, Mirador del Cable.Desde la población de Espinama sale una pista que transcurre por parajes excepcionales. Solo trail, ocasionalmente con trafico restringido, cruza loa Picos pasando cerca del naranjo de Búlnes y enlazando con Sotres ya en Asturias.